En el punto de mira: entender y abordar la sensibilidad a la luz
Fotofobia, sensibilidad a la luz, aversión a la luz.
Si notas molestias visuales en condiciones de luz cambiantes, podría ser recomendable explorar varias opciones de lentes graduadas, incluidas las lentes fotocromáticas, diseñadas para ayudarte cuando te expones a intensidades de luz variables.
Profundizamos en los detalles para ayudarte a entender exactamente qué es la sensibilidad a la luz, a quién afecta y cómo combatirla con lentes fotocromáticas de fabricantes de calidad como HOYA.
¿Qué es la sensibilidad a la luz?
La sensibilidad a la luz, también conocida como fotofobia, es una intolerancia a la luz que causa molestias o dolor¹. Las personas con sensibilidad a la luz muestran reacciones como entrecerrar los ojos cuando la luz es brillante (ya sea solar o artificial), aunque también pueden verse afectadas cuando los niveles de intensidad son más bajos. Según WebMD, «la fotofobia no es una afección, es un síntoma de otro problema».²
¿A quién afecta?
Está bastante extendida la idea errónea de que la sensibilidad a la luz solo afecta a las personas mayores. Aunque su prevalencia es más alta entre las personas mayores, debido a los cambios oculares asociados con la edad (como cataratas o glaucoma), el aumento del uso de medicamentos y la reducción de la pigmentación ocular con el tiempo, las personas más jóvenes también experimentan sensibilidad a la luz. En todo el mundo, la fotofobia está aumentando, especialmente entre la población más joven. Según las estadísticas, el 66 % de las personas padece sensibilidad a la luz, y el 74 % de las afectadas tiene entre 18 y 40 años de edad.³ Algunos factores que contribuyen a esto son los cambios en el estilo de vida y el aumento del tiempo de uso de pantallas, con una creciente preocupación por la fatiga ocular. Como señala Verywell Health, la sensibilidad a la luz «suele ser una experiencia recurrente y benigna (no médicamente grave)».⁴
Los síntomas más comunes son:
Aunque es posible que reacciones de forma normal a un entorno más luminoso, a veces los síntomas pueden ser menos explícitos. En caso de experimentar los siguientes síntomas cuando te expones a la luz, consulta a tu profesional de la visión:
- Dolor o molestias
- Entrecerrar o cerrar los ojos
- Las luces normales parecen demasiado intensas
- Ver manchas de colores brillantes
- Lagrimeo excesivo u ojos llorosos
- Visión borrosa
- Dolores de cabeza o migrañas
La solución:
Existen pocas soluciones para combatir la sensibilidad a la luz, pero creemos que solo hay una que combine la comodidad con la protección y el atractivo estético: las lentes fotocromáticas.
Al combinar el beneficio de las lentes graduadas con la protección UV de las gafas de sol, las lentes adaptativas a la luz, como la gama Sensity de HOYA, aseguran la protección de tus ojos en una variedad de condiciones meteorológicas y de iluminación. Al oscurecer tus lentes claras cuando te expones a la luz UV y aclararlas de nuevo cuando estás en interiores, esta solución 2 en 1 potencia un estilo de vida sin límites.
Como detalla All About Vision, la adición de un recubrimiento antirreflectante a las lentes fotocromáticas mejora aún más su rendimiento: «El recubrimiento antirreflectante (AR) permite el paso de más cantidad de luz a través de las lentes fotocromáticas, para una visión más nítida en condiciones de poca luz (como conducir por la noche) y elimina los molestos reflejos del sol y de otras luces en la cara posterior de la lente en condiciones de luz intensa».⁵
Dado que los síntomas y las necesidades varían en cada persona, es esencial consultar a un profesional de la visión de confianza que determine qué lentes adaptativas a la luz son idóneas para ti. No importa lo que te depare la vida, las lentes fotocromáticas te permiten disfrutarla al máximo.